Existen diferentes medidores para concienciar acerca del impacto al medio ambiente que posee cada producto que utilizamos, y consumimos en nuestra vida diaria.
Durante todo el día utilizamos una serie de objetos que nos ayudan a realizar nuestras tareas diarias, como el ordenador de la oficina, el cepillo y la pasta de dientes con la que nos lavamos antes de salir, o el café que nos tomamos al despertarnos, pero ¿Sabes que para cada uno de estos objetos se ha empleado distintos componentes, y se puede conocer el nivel de basura que generan?
Si quieres saber qué es la mochila ecológica y por qué es tan importante ser conscientes de la problemática del impacto ambiental de los productos que usamos, no te pierdas este artículo.
Qué es una mochila ecológica
Todos los productos que disfrutamos y que nos ofrecen comodidades en esta vida moderna están elaborados con una determinada cantidad de materiales que no se trata solamente de los componentes que estos presentan, sino también la extracción de materias primas para realizarlo, las máquinas utilizadas para su fabricación, el transporte, el envasado, y el tratamiento de los residuos derivados.
Todos estos elementos se miden mediante un indicador al que se le llama Mochila Ecológica.
El objetivo de la mochila ecológica es generar consciencia en los consumidores acerca de la cantidad de recursos naturales y energía, que intervienen en la producción de un kilo de cualquiera de los objetos con los que cuentas.
Se trata de un indicador que fue pensado y utilizado por primera vez por un investigador llamado Fredrich Schidt-Bleek en el año 1994, quien asoció los productos terminados que podemos ver en las tiendas como solo la parte visible de lo que consumimos, ya que en cada objeto o producto hay mucho más de lo que se ve y esto también tiene su peso.
De este peso oculto de cada cosa que el consumidor no ve surge la mochila ecológica, para generar consciencia de que cada una de nuestras pertenencias también tiene un peso ecológico y contribuye en cierta forma al deterioro del medio ambiente, desde que se produce hasta que dejamos de utilizarlo y lo descartamos.
Diferencia entre mochila ecológica y huella ecológica
Seguramente hayas oído alguna vez el término Huella Ecológica, y creas que esto tiene una similitud con la Mochila Ecológica. Lo cierto es que si bien se trata de dos medidas de impacto ambiental, el concepto de ambas es diferente.
Los seres humanos tenemos un estándar y un modelo de vida que genera un constante impacto en el medio ambiente, y la huella ecológica se encarga de medir en cantidad de planetas cuántos de esos se necesitan para mantener este modelo, obteniendo resultados realmente alarmantes.
La mochila ecológica está centrada en los productos y las comodidades que necesitamos para vivir y el peso que se encuentra detrás de cada una de estas cosas, midiendo así el impacto en el medio ambiente que estos tienen desde su fabricación, el mantenimiento, y la basura que genere cuando ya no se utilice.
¿Qué busca decirnos la medición de la Mochila Ecológica?
Además de generar consciencia en que los productos que utilizamos pueden tener efectos negativos para nuestro planeta, la intención más clara de la mochila económica es concienciar acerca del modelo de desarrollo con el que contamos, y su falta de sostenibilidad.
Cada elemento que se construye y que se fabrica genera gastos tanto sanitarios como medioambientales, la energía que se consume es realmente muy importante y cada vez más elevada, así como también la cantidad de residuos generados, que crece constantemente, y parece no tener freno.
Ejemplos de Mochila Ecológica
Para que entiendas el nivel de impacto al medio ambiente que genera cada producto, se miden todas sus instancias y las cuestiones menos visibles, que son las que llevan a un número que es el peso de la mochila ecológica.
Entre los productos diarios que más utilizamos, el peso ecológico calculado sobrepasa considerablemente a su peso normal, por ello podemos decir que una cafetera tiene una mochila ecológica de 298 kilogramos, un cepillo de dientes, de 1,5kg, un ordenador, que requiere de muchos recursos en su evolución, tiene una mochila ecológica de 1.500kg, un teléfono móvil, 75kg, y un anillo de oro de 2.000kg.
Estos pesos se estiman mediante los procesos y los recursos que intervienen en su fabricación, y es que podemos decir que para fabricar una tonelada de papel se necesitan 100 mil litros de agua limpia, y cerca de 15 árboles de más de 20 centímetros de diámetro y 25 metros de altura.
El oxígeno que una familia consume durante todo un año lo gasta un avión solamente en despegar, y el agua que utilizan 9.000 habitantes se puede gastar solamente por un campo de golf durante un día.
¿Cómo liberarnos de la mochila ecológica?
Si bien todavía falta mucho, el mundo está girando hacia la sostenibilidad, y nosotros como consumidores, podríamos asumir la responsabilidad de consumir productos que prioricen el reciclaje, para continuar utilizándolos y nos olvidemos un poco de aquellos productos con obsolescencia programada, es decir, aquellos que se usan y se tiran.
Debemos buscar aquellos productos cuya mochila ecológica sea mínima, o consumir productos que no presenten este etiquetado, lo que significa que tienen menos peso para realizar las mismas acciones.